Nace una red de colaboradores del Observatorio Marino de Asturias

Cualquier aficionado a la mar puede aportar información relevante para los científicos

El Observatorio Marino de Asturias (OMA) está creando una red de colaboradores para tener muestras que les permitan el estudio de los ecosistemas marinos. Cualquier aficionado a la pesca o al submarinismo puede aportar información relevante para los científicos con tan solo una foto.

Lo cierto es que están produciendo cambios rápidos que los investigadores son incapaces de abarcar si no existe esta red ciudadana.

En una foto de un pedrero un biólogo puede descubrir hasta 20 especies distintas. La idea es que gente que sale mucho a la mar pueda aportar fotos de este estilo y es que, solo con activar la ubicación, ya se está proporcionando una información valiosa para unos expertos que no pueden abarcar todo.

Los colaboradores tendrán una tarjeta identificativa que permite dar una escala del tamaño de lo que se fotografie.

Un ejemplo de lo que les llega al observatorio es un organismo, un ctenóforo, localizado esta semana en la zona de Villaviciosa. Será una manera de comprobar los cambios que ya afectan a los ecosistemas marinos, como la desaparición de algas grandes.

Con la red de voluntarios, el  Observatorio Marino de Asturias (OMA) podrá disponer de más material de su campo de estudio.