La familia de Inmaculada Adeba cría y exporta caballos por todo el mundo

Regentan el Hotel Yeguada Albeitar, asociado al mundo de la hípica y al turismo rural

El destino profesional, como 'albéitar' o veterinario rural de Benito, marido de Inmaculada Adeba, les condujo a Oneta, Villayón, hace una treintena larga de años. Una etapa con escasos momentos de ocio que decidieron ocupar con la compra de un caballo de raza árabe. Le siguió la adquisición de una yegua, comenzando así la cría de estos animales.

Con el tiempo les entró el gusanillo del salto y fue así como empezaron con caballos deportivos españoles hasta contar en la actualidad con 15, además de un buen número de potrillos.

Caballos que son la punta de lanza de un proyecto que empezó a crecer por el empeño de sus hijos en darle continuidad. En 2006 diversificaron su actividad con la creación del Hotel Yeguada Albeitar, un hotel asociado al mundo de la hípica y al turismo rural.

Le siguieron la cría de 700 cabras de leche y vacas angus para producción cárnica de 'kilómetro cero', cabras bermellas o una pequeña explotación apícola. Una realidad que una vez fue una ilusión.

Un proyecto ejemplo de tenacidad y cariño por el medio rural, en un emplazamiento que vuelve a poner de manifiesto la necesidad de apostar por la Asturias alejada de las grandes urbes.