Alfredo Canteli, nuevo alcalde de Oviedo con el apoyo de Ciudadanos

Asegura que hoy comienza "un nuevo capítulo" para Oviedo

El pleno del Ayuntamiento de Oviedo ha nombrado al popular Alfredo Canteli como nuevo alcalde al recibir el respaldo de los nueve concejales de su partido y de los cinco de Ciudadanos tras cuatro años de gobierno tripartito del PSOE con Somos e IU, un acuerdo duramente criticado por el equipo saliente.

En la sesión constitutiva de la nueva corporación han presentado también su candidatura los cabezas de lista de PSOE, Wenceslao López, y de Somos Oviedo-Podemos, Ana Taboada, que han obtenido únicamente el respaldo de sus respectivos grupos mientras que Vox, que había anunciado su apoyo a Canteli, ha optado por abstenerse.

Para el nuevo alcalde de la capital asturiana, hoy comienza "un nuevo capítulo" para Oviedo que responde al "inequívoco" deseo de cambio mostrado en las últimas elecciones municipales que hicieron al PP la fuerza más votada pese a perder dos ediles respecto a 2015.

Canteli, tras las críticas vertidas desde los grupos de oposición al regreso al poder de un PP que gobernó la ciudad entre 1991 y 2015, ha advertido, dirigiéndose directamente a su antecesor en el cargo, que llegaba a la Alcaldía desde una trayectoria profesional previa "marcada por la honestidad y la honradez".

Canteli ha admitido que buena parte de los principales proyectos de futuro de Oviedo dependen de la cooperación con los gobiernos de Asturias y de España, ambos del PSOE, y a los que se ha ofrecido como "un colaborador leal" pero también como "una negociador duro y exigente" en defensa de los intereses de la ciudad.

En la defensa de su candidatura, el alcalde saliente ha centrado sus críticas en Ciudadanos, con los que negoció hasta ayer un posible acuerdo que habría requerido del apoyo de al menos un edil de Somos, por haber "traicionado" el proyecto de regeneración y cambio emprendido en Oviedo hace cuatro años.

A su juicio, tras su acuerdo con el PP, la formación naranja viene "a blanquear la basura" que los populares dejaron en sus 24 años previos de mandato en los que fueron responsables "de un expolio cuantificado en al menos 270 millones de euros".

"Desde hoy Ciudadanos será socio del PP no sólo en el gobierno, también será cómplice del expolio y el despilfarro que ha sufrido Oviedo", ha subrayado tras acusar a los populares de haber destruido el Ayuntamiento "por dentro y por fuera" y de regresar ahora al poder para continuar "haciendo fechorías" después de que hace cuatro años se lograra desalojar "a los mercaderes de lo público".

Por su parte, el cabeza de lista de Ciudadanos y próximo primer teniente de alcalde, Ignacio Cuesta, ha aprovechado su turno para defender la necesidad de que Oviedo contara con un gobierno "estable y sólido" que dé seguridad institucional para afrontar los retos de una ciudad "paralizada" y que necesitaba "un cambio de rumbo".

Cuesta ha defendido su voluntad de alejarse de extremismos y populismos, tanto de "una izquierda bolivariana que pretende imponer un régimen comunista de la peor especie" como de una extrema derecha "que atenta contra los valores constitucionales más arraigados".

Tras incidir en que no respondería a las "calumnias, infamias e injurias" vertidas contra su partido tras anunciar su pacto con el PP, el edil naranja ha advertido al PSOE de que si pensaba que ofreciendo cargos fuera del ámbito municipal -la Presidencia del parlamento regional y un senador por designación autonómica- iban a obtener su apoyo "es que no conocen este partido".

En Ciudadanos ha centrado también sus críticas la candidata de Somos Oviedo, Ana Taboada, tras recordar que hace cuatro años su grupo -que contaba con un edil más que el PSOE- dio la Alcaldía a los socialistas "sin pedir nada a cambio" para dar "un vuelco al tablero" y sacar del poder "al PP más retrógrado".

Ese PP, ha advertido, vuelve ahora al gobierno junto a la fuerza política "más oportunista" -en alusión a Ciudadanos- y por la que, a su juicio, el PSOE apostó "hace tiempo" para mantenerse en el poder, y con un candidato como Canteli, "un paracaidista dispuesto a cualquier cosa para ser alcalde y en manos de aquellos que vuelven dispuestos a hacer lo que mejor saben: saquear lo público".

Por su parte, la cabeza de lista de Vox, Cristina Coto, que pese a haber anunciado su apoyo a Canteli antes de que se conociera el acuerdo con Ciudadanos ha optado por la abstención, ha señalado que el resultado del 26-M fue "un varapalo" para el gobierno tripartito tras cuatro años "en blanco y negro" marcados "por la parálisis, la burocracia paralizante y la presión fiscal asfixiante".

"La heroica ciudad no ha dormido la siesta", ha apuntado Coto tras advertir sobre la falta de concreción del acuerdo "tras unas negociaciones opacas" entre el PP y Ciudadanos, una formación "que pone cordones sanitarios y recibe órdenes de París", pero "sin remilgos para beneficiarse de los sillones" obtenidos "en el poco edificante bazar de las negociaciones opacas".