Salen las primeras producciones homologadas

Hasta 500.000 mascarillas al día se van a reciclar para uso sanitario

Hoy han salido de un fábrica de Baíña, en Mieres, los primeros geles alcohólicos elaborados por varias empresas asturianas y que tienen la homologación necesaria para su uso, por ejemplo, en residencias de mayores. Ha sido fruto de la unión, de la que han surgido ideas para atender a la gran demanda de estos productos. Lo mismo pasa con las mascarillas. Se podrán esterilizar unas 500.000 al día, gracias a la colaboración, en este caso, de una decena de empresas.

Los primeros geles hidroalcohólicos elaborados de forma altuista por siete empresas asturianas llegarán hoy a diversos centros residenciales públicos y privados de la región. Los primeros lotes salieron esta mañana a destinos del suroccidente y zonas más alejadas del centro y el reparto ha continuado este mediodía con la colaboración de la Guardería del Principado, Protección Civil y Bomberos.

Hoy ha salido la primera gran remesa, cerca de 3.000 litros de producto, distribuidos en envases de distinta capacidad. El objetivo es producir un total de 15 toneladas en dos semanas. En la planta de Auxquimia en el Polígono de Baíña se encargan de las labores tres operarios, más el personal de laboratorio.

Hasta 500.000 mascarillas al día se van a reciclar para uso sanitario

El proceso de reciclaje de mascarillas comienza en los hospitales, donde se almacenan en contenedores las protecciones ya usadas. Es en la empresa Therman donde las someten a tres procesos de limpieza y desinfección, con productos químicos.

Las mascarillas se esterilizan una vez más en los autoclaves de la empresa Olmar: dentro de la propia bolsa, son expuestas a altas temperaturas y presiones. Ya estarían listas para volver al Servicio de Salud del Principado.

Todo el proceso de homologación y arranque de este sistema pionero se ha llevado a cabo gracias a la solidaridad de 10 empresas que participan en él. Aportan material y productos químicos, ceden sus instalaciones y trabajadores y, lo más importante, ponen su saber hacer al servicio del Sespa.

A través de esta cadena de profesionales, todo un ejemplo de economía circular, se esterilizarán 500.000 mascarillas al día.

Con el desinfectado de mascarillas en funcionamiento, empiezan a hacer pruebas para reutilizar otros elementos, como batas o pantallas protectoras. Pruebas que deberán pasar los procesos de homologación que requiere su uso sanitario.