Montepío redujo la deuda en 2022 en 1,29 millones, hasta situarla en 11 millones

Los equipamientos de Ledesma y Felechosa respondieron a las expectativas, afirma Jesús Armando Fernández

El presidente del Montepío, Jesús Armando Fernández, ha destacado hoy el balance "positivo" con el que la mutualidad de la minería asturiana ha cerrado 2022, marcado por un "gran esfuerzo" para mantener la acción social y finalizar el ejercicio con una reducción de la deuda de 1,29 millones de euros para situarla en 11 millones.

La gestión económica llevada a cabo el pasado año permite al Montepío "reducir una de las debilidades" que afronta debido a la deuda que venia arrastrando en los últimos años de 17 millones de euros, que en 2022 redujo en 1,29 millones para situarla en 11 millones, aún alta", ha apuntado Fernández, que espera en los próximos años rebajar hasta los 4 o 5 millones para hacerla "asumible".

En declaraciones a los periodistas, antes de la celebración de su asamblea general, ha subrayado que 2022 fue un año "complicado" por las condiciones externas, por la importante subida de la inflación, que obligó a reestructurar todo el plan anual, no solo manteniendo el empleo y generando recursos alternativos sino también a establecer un plan social y de protección de los mutualistas.

Según ha remarcado, la mutualidad ha asumido los costes derivados de la inflación en cada uno de los complejos residenciales como un "método más de incentivo y protección" a sus socios.

Las cuentas de la entidad del pasado año arrojan datos "positivos" en todas las empresas y en la Mutualidad, con 757.000 euros de resultado favorable, antes de impuestos, ha afirmado Fernández ante los resultados "ordinarios dentro de las condiciones extraordinarias" que se dieron durante el ejercicio.

En 2022 la entidad realizó inversiones por importe de más de 400.000 euros y superará el medio millón en el presente año destinados a la mejora de las inversiones y a la recuperación de los establecimientos residenciales hasta ahora "infrautilizados o utilizados en menor dimensión de lo que podían dar de sí".

Los equipamientos de Ledesma, en Salamanca, y Felechosa, en Aller, han respondido a las expectativas, ha afirmado Fernández, que ha precisado que en el caso de la residencia asturiana el objetivo "no es obtener unos resultados económicos satisfactorias si no dar un servicio satisfactorio" a los mutualistas.