El Principado quiere impulsar misiones científicas en cinco ámbitos

Aportará 800.000 euros para el desarrollo de los planes piloto

El Gobierno autonómico quiere impulsar misiones científicas en cada uno de los cinco ámbitos que componen su estrategia de especialización inteligente (S3) como son el agroalimentario, el energético, la industria 4.0, la salud y envejecimiento activo y otro que impulsa Asturias como un lugar atractivo para vivir.

Así lo ha afirmado el consejero de Ciencia, Innovación y Universidad, Borja Sánchez, momentos antes de la presentación de los proyectos impulsados por seis consorcios público-privados encargados de desarrollar las primeras misiones científicas de la región en los ámbitos de la longevidad y el envejecimiento activo y de la reducción de emisiones y gases de efecto invernadero.

Asturias es la primera comunidad autónoma que ha puesto en marcha el programa de misiones científicas con seis consorcios público-privados que aglutinan 90 agentes del sector y representan casi a todo el ecosistema.

Para poner en marcha estas misiones, que buscan abordar un reto que dé beneficio a la sociedad, el Principado aportará 800.000 euros para el desarrollo de los planes piloto que deberán estar listos antes de final de año.

A juicio de Sánchez, es importante que la sociedad vea que cuando con sus impuestos se destina dinero a I+D se dedica a promover este tipo de proyectos, al tiempo que ha destacado la importancia de tejer alianzas entre los diferentes agentes del sector.

En este caso se han desarrollado proyectos en dos misiones pero de cara al futuro, el consejero aspira a tener un programa por cada uno de los ámbitos de especialización de la S3 del Principado, que son cinco.

Además, quiere que, al margen de la financiación de los proyectos piloto, el Principado pueda apostar por algún proyecto que destaque por su aplicación inmediata o efecto positivo.

El director de estrategia y desarrollo de negocio de Idonial, David González, ha explicado que el centro tecnológico participa en cinco de los seis proyectos entre los que se encuentra uno que trabaja en lograr la reutilización de residuos de la cadena alimentaria que puedan tener un valor añadido, en otro sobre la realización de un mapa de microbioma de población mayor o un tercero relativo a la aplicación de tecnologías digitales para prevenir enfermedades crónicas.

Desde el punto de vista industrial, un proyecto trabaja en realización una "mina" de materias primas que ahora mismo se están desechando y que con tecnología se pueden recuperar o en un plan para capacitar a Asturias desde el punto de vista tecnológico e industrial en toda la cadena de valor del hidrógeno.

Por su parte, la catedrática de biología celular de la Universidad de Oviedo Ana Coto es coordinadora científica del consorcio ELDER, que busca reducir la problemática de la dependencia con el desarrollo de un índice de fragilidad que permita predecir la situación de riesgo antes de la dependencia para poder actuar sobre ella.