La cáscara de las castañas podría ser reutilizada como aislante para viviendas

Dos investigadores crean en su laboratorio de Llaíñes un material similar al corcho

La cáscara de las castañas podría tener una segunda vida como aislante para viviendas. Es uno de los posibles usos fruto de una investigación desarrollada por Marlén López y Manuel Persa en su laboratorio de Llaíñes / Ladines, en Sobrescobio.

El resultado obtenido, un material muy similar al corcho, que está siendo testado por el Grupo de Investigación de Construcción Sostenible de la Universidad de Oviedo para estudiar sus propiedades como aislante acústico y térmico.

Una observación de la naturaleza que aprovecha los residuos orgánicos para reconvertirlos, por ejemplo, en fieltros con los que crear nuevos productos como una pantalla para lámparas hecha con piel de naranja.

Nuevos materiales y diseños creados a partir de otros pensados para aprovechar todo lo que nos da la naturaleza.